Excepto en en AMBA y la provincia de Chaco la reanudación de la actividad escolar se produciría después de las vacaciones de invierno en casi todo el país.
El protocolo presentado, que aún debe ser aprobado por el Consejo Federal y las autoridades universitarias, prevé el uso de tapabocas, el mantenimiento de 1,5 metro de distancia interpersonal y aulas con pocos alumnos, divididos por grupos. Los estudiantes alternarán días de actividad en la escuela y días de actividad en el hogar.
La cartera educativa en conjunto con el Consejo Asesor para el regreso presencial a las aulas, presentó un protocolo que espera la semana próxima ser aprobado por el Consejo Federal de Educación, el Consejo Interuniversitario Nacional y por el Consejo Rectores de Universidades Privadas. Según explicaron el ministro Nicolás Trotta y el director del Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET) y responsable del Consejo Asesor, Diego Golombek, el regreso a clases será con uso obligatorio de tapaboca, manteniendo siempre un metro y medio de distancia interpersonal, con aulas con pocos alumnos bajo la modalidad de “aula burbuja”, y sin actos ni encuentros. Además las instituciones deberán contar con las condiciones edilicias básicas y con los elementos de higiene necesarios.
La vuelta se hará con un sistema mixto: los alumnos irán algunos días a la escuela y otros días seguirán estudiando desde sus hogares. En el caso de confirmarse un caso positivo de covid-19 dentro de la institución, se deberá cerrar el establecimiento por un día y realizarse una exhaustiva desinfección. “No podemos proyectar el regreso en Ciudad de Buenos Aires”, explicó Trotta en la conferencia de prensa que dio junto a Golombek. El ministro se refería a las excepciones para el inicio de clases en agosto, que también incluirían a la Provincia de Buenos Aires y al Chaco, en donde aún hay gran circulación del virus.
Página 12